Una vez más, os traigo una película surcoreana (no os preocupéis, este blog no va a convertirse en un sitio de cine asiático, seguirá habiendo diversidad, palabrita...) de la que me he quedado totalmente prendada.

Dejad que os diga que, cada vez que veo un filme protagonizado por Song Kang-ho (Joint Security Area, Simpatía por Mr. Venganza, Thirst...), me doy cada vez más cuenta (si es posible), de lo buen actor que es. Conmueve, y tiene la capacidad de interpretar casi todo tipo de papeles. Simplemente... lo hace genial. Tampoco puedo dejar de hacer mención a Sin Se-kyeong, la co-protagonista. Muy buen trabajo.
Y, por último, toca hablar de eso que tanto me gusta a mí... la fotografía. Ya os habréis dado cuenta de que es uno de los factores decisivos (aunque ni mucho menos el único) para que una película me encante. Pues bien, es maravillosa e impresionante. Una joya para la vista.
Os la recomiendo encarecidamente.
Intentaré verla porque me la recomiendas tu, que sino.... no la veo ni harta de vino, ja ja ja. No me gustan mucho este tipo de pelis surcoreanas. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Lobezna. No he podido evitar reír con tu comentario!! Tampoco es necesario que la veas sólo porque la recomiende yo jajaja. Bueno, a ver si hay suerte y te gusta un poco.
EliminarUn abrazo!
No suelen ser de mi gusto,
ResponderEliminarpero aprecio tu trabajo en la información que nos das y nunca se sabe
feliz semana
^^