sábado, 6 de abril de 2013

Pensées Nocturnes - Nom d'une Pipe!



Nom d'une Pipe es un álbum excéntrico, rico en texturas, que parece transportarnos a principios del siglo XX o el período de entreguerras, sumergiéndonos en una atmósfera decadente, teatral, dramática y, en muchos momentos, casi caótica. Si tuviera que definirlo en una palabra, diría experimental, ecléctico: a lo largo del disco, encontramos una mezcla entre black metal, música ambient, jazz, música clásica y música circense. Todo junto (en este sentido, me recuerda a Arcturus y su La Masquerade Infernale). El resultado de esta amalgama es, permitidme, el caos tornado en elegante música. Esto es avant-grade/black metal, señores y señoras, saben ya a lo que se atienen, tomen asiento. 

Con la oscura y agresiva Il a mangé le soleil, arranca el disco,  y La marionnettiste, donde se aprecian bien los tines jazz, continúa. Les hommes à la moustache es un interludio orquestal, las cosas se vuelven más interesantes. Le berger viene después, un tema en el que destaca la combinación de voces limpias/agresivas/guturales (con preeminencia de estas últimas). Más lentamente y con piano comienza La Chimère, una fantasía muy orquestada, que no abandona los momentos de agresividad que caracteriza al género. Es en L'Androgyne (mi tema favorito) donde los elementos decadentes y las influencias del jazz mejor se aprecian. Incluso se distingue un instrumento tan poco frecuente como el acordeón y se añade una voz femenina. La Sirène es otra pieza muy dramática, un fragmento de pura locura, impresionante. Como un caótico vals, la pegadiza La Choeur des Valseurs viene detrás, y, para cerrar el álbum, Bonne bière et bonne chère, otro tema orquestal que deja un agradable sabor de boca y la sensación de haber escuchado, si bien un disco raro como él solo, una gran aporte al género.