jueves, 24 de febrero de 2011

Arco Iris...

Tan hermoso, tan efímero.... Detener el tiempo. ¡Cógelo! ¡Que se quede ahí! Apenas piensas esto, la luz cambia y desaparece. Ah, la luz, la misteriosa luz de las tardes de invierno, húmeda y caprichosa.




miércoles, 23 de febrero de 2011

Carpe Diem...

Hace tiempo que me fascina la obra de Baudelaire, su forma de expresar lo sórdido, lo grotesco, de forma bella y atrayente. Aqué os dejo un poema suyo que habla sobre el paso del tiempo, El Reloj.
El reloj

¡Reloj!, dios implcable, siniestro, solapado,
cuyos dedos: "¡Recuerda!" dicen amenazantes;
lo mismo que en un blanco, los dolores vibrantes
han de ir a clavarse en tu pecho aterrado.

Semejante a una silfide detrás de un bastidor,
huirá hacia el horizonte el placer la caricia;
cada instante devora un trozo de delicia
al hombre concedida, mustia un poco la flor.

Tres mil seiscientras veces a la hora, el segundo
nos repite: "¡Recuerda!", con seca voz de insecto.
El ayer dice soy el ahora, y en efecto,
me he chupado tu vida con este labio inmundo.

"¡Remember! ¡Esto memor! ¡Acuérdate!" (Sonoro
hablo todas las lenguas con gorja de metal)
El minuto es la ganga, ¡oh, inconsciente mortal!,
de la que es necesario extraer todo el oro.

"¡Recuerda!" Porque el tiempo es jugador tenaz
que nos gana sin trampa, golpe a golpe, lo sé.
Cae el día, ya viene la noche. "¡Acuérdate!"
Se agota la clepsidra; el abismo es voraz.

Se acerca ya la hora en que el divino azar,
o la augusta virtud, tu esposa aún intocada,
o el arrepentimiento (¡oh postrera posada!)
te dirán: "¡Muere al fin, viejo loco de atar!"
- Charles Baudelaire.

jueves, 10 de febrero de 2011

Escapismo...

Tal vez una de las Rimas que más me gustan, expresa el deseo profundo de escapar, el miedo al dolor, el gusto por la tempestad y la furia de la Naturaleza...

Rima LII

Olas gigantes que os rompéis bramando
en las playas desiertas y remotas,
envuelto entre la sábana de espumas,
¡llevadme con vosotras!

Ráfagas de huracán que arrebatáis
del alto bosque las marchitas hojas,
arrastrado en el ciego torbellino,
¡llevadme con vosotras!

Nubes de tempestad que rompe el rayo
y en fuego ornáis las desprendidas orlas,
arrebatado entre la niebla oscura,
¡llevadme con vosotras!

Llevadme por piedad adonde el vértigo
con la razón me arranque la memoria.
¡Por piedad! ¡Tengo miedo de quedarme
con mi dolor a solas!

- Gustavo Adolfo Bécquer.

lunes, 7 de febrero de 2011

Adiós, Gary Moore

Cual fue mi  nada grata sorpresa al leer ayer que había fallecido a los 58 años en un hotel de Estepona, en Málaga (aparentemente por causas naturales, pero las causas de la muerte son todavía desconocidas), este gran guitarrista. Una pérdida importante, sin lugar a dudas.
Aquí dejo una de sus canciones que personalmente más me gusta, "The Loner", instrumental y que creo que transmite mucho:

jueves, 3 de febrero de 2011

Poesía: Era allá...

Era allá, bajo los grandes arcos de la muerte,
color de sueño y de dolor, en planicies eternas
con sabor a Egipto y al silencio,
en la tierra perfecta del adiós y de nunca;
país de tras Poniente y tras la luz, hora ajena
en el eje de ya nadie, contemplación sin fin de nada en nada,
cruz de fuego y espejo tras cascadas de sangre
imposeída, allá, todo el allá que el grito
del infante fuera un día; era allá y aún más lejos,
por llanuras nevadas de mitos sin retorno,
con eclipses y frentes sin hora ni presencia,
en un haber ya sido y cuando fuera,
en un ya ser cumplido lo esperado,
en un total vacío; era allá, más allá, muy allá
del país del Origen y del viento funeral de la noche,
un clamar de la estrella al fondo del abismo,
una sima y un sexo crujiendo como escarcha,
más lento y más allá.
más, muy lejos eterna la geometría perfecta,
el descanso absoluto, el haber sido, bien igual a no haber sido,
allá frente a mares que braman de ágilas insomnes,
desde torres auscultan el eco de los vientos,
en tardes sin dulzura ni oración,
en caminos sin rastro de destino,
por huertos ya vacíos desde siglos,
junto a pozos cerrados por el dolor del tiempo. Solo.
Allá, siempre allá, y un recuerdo que cruza,
como un ave perdida, la dudad de haber sido
cuando la rosa fuera.
Paz. Suma paz. Los arcos de la muerte tras la arena.
El juego del dios sol. La recta pura.
Perfecta perspectiva, línea inerte,
un dolor en el alma del que hubiera llegado
allá, bien allá, a donde muchos, tal vez todos
por muchos caminos llegan.

Alfonso Vázquez Alonso.
19 - 10 - 1975


martes, 1 de febrero de 2011

Echando abajo mitos

Aquí dejo relatadas una serie de experiencias que cambiaron mi forma de ver las cosas:
  1.  ¿Hay algo peor que tu madre tatareando The Final Countdown por la calle, en alto? ¡Sí!: que, además, la cante por fonética...
  2.  Un conocido mío dijo: "¿Y éstos son los Scorpions? ¡Pero si parece una mujer cantando! Además, hacen una música edulcorada y envuelta en papel de celofán. Yo quiero marchaa!"
  3.  El ronquido de mi padre  (un señor RONQUIDO) en la parte más apoteósica y gloriosa de Wind Of Change, por si fuera poco, la versión del Moment Of Glory con la Filarmónica de Berlín.
  4. Que tu monitor de judo haga un movimiento al calentar que encaje con el estribillo de Tease Me Please Me, que está sonando de fondo. Nunca escucharé esa canción igual.
  5. Por último, entrar a una tienda de discos de segunda mano, preguntar por Twisted Sister y que te respondan, con gesto pensativo: "Eh... sí. Búscalo por el apellido"
De momento, no recuerdo más.

Hasta la vista.